SILA Y SU CARTA FELIZ

SILA

No hace demasiado tiempo, un lunes de tantos, compartimos una publicación en redes sociales que rezaba así:

«Querido amigo/conocido/familiar. SI. TENGO CÁNCER. Pero eso no significa que me tengas que mirar con esos ojos de pena y de lástima, y hasta de terror. Aunque sé que no lo haces con mala intención, si me miras así, parece que «me condenas» de antemano. Y, ¿sabes una cosa? Cáncer no es sinónimo absoluto de derrota. Cáncer puede englobar muchas cosas -no todas tan fatalistas como las que de antemano se piensan- como por ejemplo esperanza, recuperación, superación, e incluso cierto bienestar y cierta calidad de vida. Y, ¿sabes otra cosa? Que «me condenes» de antemano no me ayuda. Poco aportan esos pensamientos tan fatalistas a una persona que tiene por delante un camino en el que sortear una piedra tan grande y fea. Alguien me ha dicho que en este camino lo que importa es SUMAR bien. Yo le quiero creer. Y le creo. Y como te imaginarás, tu pena, tu lástima, y tu miedo, solo restan. Así que, si quieres estar a mi lado, ayúdame a SUMAR para así conseguir sortear esta piedra tan grande y fea. Gracias de antemano. Un abrazo.»
Caminantes, ¿vamos allá? ¿Sumamos bien una nueva semana? ¡Claro que sí!

si tengo cáncer

Foto | Nora Zubia @slowandchic

Una semana más tarde -cuando conseguimos leer todas las noticias relacionadas con el cáncer, que semana a semana vamos acumulando para luego algunas compartirlas con vosotros- leímos esta noticia, y, con ella, una CARTA FELIZ.

https://www.lavozdegalicia.es/noticia/coruna/betanzos/2018/05/01/carta-feliz-silvia/0003_201805H1C7991.htm

Y entonces, sin pensarlo mucho, me puse a indagar y contacté con Sila. Menuda gran coincidencia haber hablado de todo esto en Jaque y estar leyendo en aquel momento aquella carta… Además, a decir verdad, no teníamos ninguna duda: traer a Sila de invitada sería un gran acierto. Su luz traspasaba la pantalla del ordenador y esas palabras contenidas en aquella carta eran perfectas para ayudar a nuestros caminantes y quizás a conocidos de nuestros caminantes…. (por favor leedla, ¡no tiene desperdicio!). Y la entrevistamos para rematar la faena. Y el resultado está aquí:

Hola Sila, cuéntanos, ¿quién eres?

Soy una chica normal que vive en el rural con su familia y que está pasando por una situación de salud complicada. Soy mamá, soy artista y mil cosas más ¡jaja! ¡nunca paro! Una chica feliz de 33 años.

Defínete en tres palabras:

¡¡¡¡Qué difícil!!! Optimista, bohemia y espiritual.

¿Por qué la tristeza no es tu amiga?

Porque no le veo sentido ni necesidad, es un lastre. Entiendo que es inevitable y necesaria en algunos momentos de la vida, pero solo en circunstancias puntuales, por ejemplo, para curar un dolor en un momento determinado. Pero la tristeza como una compañera perpetua no tiene ningún sentido, es solo un impedimento para disfrutar de la vida. Aunque, repito, sí que habrá momentos en que tienes que estar triste y permitírtelo… pero siempre y cuando no te quedes estacando en esa tristeza.

¿Qué le dirías a alguien que también está enfermo?

Lo primero, que no piense que está enfermo. Yo misma no me acabo de identificar de hecho como una persona enferma. Yo solo siento que mi cuerpo está atravesando un proceso de cambio brutal…. pero no me identifico ni me victimizo como tal en ese rol de persona enferma. Le diría además que le de la vuelta y que piense que está en un proceso de curación. Y por supuesto, le diría que no se autocompadezca, que no piense “ay pobre de mí” e intente afrontarlo como se afronta cualquier otra circunstancia difícil dela vida, como quedarse en paro, separarse etc… pero sin victimizarse, la autocompasión nunca ayuda. Por último, le recordaría que las palabras tienen un poder tremendo y nuestros pensamientos no dejan de ser palabras, así que a pesar del miedo y catastrofismo que nos meten los médicos y la sociedad en general sobre el cáncer, que se diga a si mism@ cada día que se está curando y que  todo va a salir bien.

¿Qué le dirías a alguien que inclina la cabeza cuando alguien con cáncer se atraviesa en su camino? ¿Qué le aconsejarías?

Que se lea mi carta -risas- lo primero… Bueno, a ver, seguro que eso también lo hice yo en algún momento antes de todo esto…. Es complicado porque con este tema es difícil saber qué decir, a veces la gente se pone nerviosa y suelta lo primero que le viene…. Pero le diría lo mismo que a la persona que tiene cáncer: que no nos victimicen. Tener cáncer es una de tantas cosas que puedes tener: unos tenemos una hernia, otros esclerosis, otros trastorno bipolar…. y otros, cáncer…. son circunstancias de la vida. Que no nos vean como “precadaveres andantes”…. Que no se les pase por la cabeza que el desenlace va a ser sí o sí la muerte…. Quizás lo sea, o no, pero incluso en esos casos, pensarlo desde el primer momento, no ayuda…. Y que si no tienen nada positivo o constructivo que decir o aportar, aunque la intención sea buena, que mejor que no digan nada, o nos hablen de cualquier otro tema.

Serías capaz de decirnos las tres peores cosas que desde tu punto de vista se le pueden hacer/decir a alguien enfermo de cáncer?

Contar otras experiencias de personas con cáncer, especialmente las que tienen el peor desenlace. Y ojo, lo critico desde la empatía… puesto que en cierto modo lo comprendo, es como un recurso… cuando no sabes muy bien qué decir. “Mi cuñado fulanito se murió de cáncer de no sé qué…” eso es lo último que necesitas oír.

Falta de discreción: preguntarte en alto en sitios públicos (super, farmacia, calle…) cosas muy concretas que quizás no te haga gracia airear, por ejemplo “¿Y QUÉ TIPO DE CÁNCER TIENES?” En mi caso no tengo ningún problema para hablar abierta y naturalmente de ello, pero hay que tener en cuenta en qué momento y en qué lugar.

Que te pregunten por temas meramente médicos que estás harta de repetir, como por ejemplo las sesiones de quimio: en mi caso parece que mi cuerpo se revuelve solo en cuanto escucha este tipo de preguntas, por pura asociación mecánica con los efectos secundarios de la quimio…

¿Qué es para Sila la felicidad?

Es tener la libertad cada día para vivir como tu quieres, estar rodeada de gente que amas y que te ama, y no tener ni odios ni miedos.

A pesar de que ahora  tengo más limitaciones a nivel físico (linfedema en la pierna y embolia pulmonar), busco hacer aquello que me aporta felicidad dentro de mis posibilidades y tengo muchos momentos muy felices. A diario. Como digo en la carta, la felicidad perpetua es algo imposible en esta vida, pero la felicidad a ratitos es siempre alcanzable en cualquier circunstancia, hasta en las más adversas.

¡Sila! Gracias por esta entrevista. Gracias por tu carta. Y gracias por tu empuje, garra y buena templanza. ¡Hasta la vista amiga!

¿Lo veis caminantes? Siempre hay alguna buena lección de vida pululando por ahí…

¡Oh yeah!

Anuncio publicitario

4 comentarios en “SILA Y SU CARTA FELIZ

  1. Sila es una mujer valiente y yo tengo que decirle que me representa totalmente, sobre todo porque la felicidad son esos momentos. Nadie es feliz o infeliz al 100%. Pero podemos seguir viviendo y disfrutando poniendo la enfermedad a un lado. Un beso para todos.

    Le gusta a 1 persona

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s