Hacía mucho tiempo que teníamos en la cola de Jaque esta historia. Pero por un motivo o por otro, siempre teníamos que acabar posponiendo su publicación y al final, nunca llegaba ese momento de sentarme delante del ordenador para preparar una introducción a la altura de semejante HISTORIA. Confieso que mi subconsciente agradecía en parte esto, pues sabía que enfrentarme a la preparación y elaboración de este post no iba a ser pan comido…
Acabo de releer la historia de Vanessa o, como se la conoce en Instagram, Burbujas de Vida. Y las lágrimas vuelven a asomar. Muchas historias intensas os hemos contado ya desde Jaque. Esta es intensa como la que más. Tremenda. Y viene a llenaros de agradecimiento -en este momento en mi cabeza solo resuena, que afortunada eres-, de ganas de vivir y de esperanza, fuerza y coraje. A todos. A todas. En especial a todas esas mujeres con cáncer de mama metastásico…
Esas mujeres que viven contra viento y marea y que no claudican y que no cesan de darnos lecciones de vida contantes y sonantes. Las que vemos por redes sociales. Y las que no vemos. Las que conocemos y las que no conocemos. Las que están y las que por desgracia ya no están… A todas, todas, todas, les mandamos hoy un abrazo especial y lleno de energía de la buena.
Y ahora caminantes, leed esta historia en butaca preferente. La historia de Vanessa bien lo merece: Sigue leyendo